Cada persona es dueña de su propia vida, y de como vivirla, algunos se encuentran con mas dificultades que otros, pero siempre, siempre hay mas de una opción en cada paso que damos. Desde que nacemos todos los seres humanos tenemos numerosos sueños a conseguir, muchas metas a las que llegar, que poco a poco se iran deshaciendo a favor, o en contra de nuestro bien. De niños es cuando más ilusion aportamos, debido mayormente a la ignorancia que tenemos. Deseamos ser superheroes, trabajar de lo mismo que nuestro padre, ser dueños de la mayor jugueteria del mundo, ir a marte y miles de cosas así de ilógicas. A medida que ganamos conciencia y pensamos con más lógica, cambiamos esos sueños imposibles por cosas mas a nuestro alcance pero, aún así, dificiles de lograr, seguimos siendo exigentes, queremos ser futbolistas profecionales, viajar a todos los paises del mundo, sacar una carrera para ganar mucho dinero, etc etc... seguimos en la inmadurez. Una vez nos acercamos al adulterio, los bienes personales se van corvintiendo en intereses comunes, deseas más la felicidad a las personas a las que quieres, obtener un buen trabajo para poder tener hijos y ser una familia feliz, trabajar horas extras y ahorrrar para viajar con tu chica amada, hacer un asadero en el que esten todos tus familiares y amigos, te centras más en vivir pausadamente y acompañado. En la vegez, lo unico que queremos es la felicidad de los otros, y no la nuestra.
Pero la cuestión es lo qué ha sucedido en el transcurso de una etapa a otra. Lo que ha pasado es que, poco a poco todo lo que imaginamos, llega un momento en que se convierte en realidad, a veces esa realidad es igual de buena, o incluso mejor que lo que imaginabamos, pero otras tantas veces, la realidad nos hace darnos cuenta de que imaginabamos tonterias y que debemos centrarnos más en otras cosas de mayor importancia. Existe gente que no quiere aceptar la realidad de una situacion en contra, es dificil aceptar algo que tras mucho tiempo de lucha, termina siendo lo que no queremos, pero es así, no hay más vuelta de hojas. Hay que luchar por nuestros sueños, pero teniendo en cuenta las realidades más cercanas que nos vamos a ir encontrando por el camino, estar preparados para situaciones, noticias, ganancias buenas que te dan ánimo y tambn para momentos no tan buenos, momentos que te quitan fuerza y es que, el ser humano está continuamente plantando realidades, muchas veces buenas y muchas veces malas, en un jardin imaginario que tiene desde que nace, y que irá cambiando conforme transcurra el tiempo... Quién mejor sepa acepte y cuide sus plantaciones, mejor vivirá.
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